DIFERENCIAS ENTRE PELVIS MASCULINA Y FEMENINA
¿Por qué hay una diferencia estructural entre el sexo femenino y el masculino?
Los humanos tenemos muchos detalles que nos caracterizan individualmente. Pues porque pelvis de la mujer tiene un objetivo adicional: además del sostén de las vísceras, la pelvis de la mujer sirve de medio de gestación y debe tener características especiales para que el bebé pueda pasar a través de ella durante el parto. Es por ello que podemos nombrar algunas de las diferencias entre la pelvis del hombre y la mujer que describimos a continuación:
El borde de la pelvis (conformado por la prominencia del hueso sacro, la línea arcuata del hueso ilion, la línea pectínea y la superficie superior de la sínfisis del pubis) tiene forma ovalada y es más grande en las mujeres, mientras que en los hombres adopta una forma de corazón y es más pequeño.
La pelvis femenina se encuentra arqueada hacia adelante, y sus huesos son mucho más ligeros y delgados que los de la pelvis de los hombres. Además, la pelvis de los hombres se encuentra rodeada de músculos que son mucho más fuertes y voluminosos que los que rodean la pelvis de la mujer.
Los acetábulos (cavidades en donde el fémur se aloja para articularse con el hueso ilion, el isquion y el pubis) es en los hombres mucho más grande que los acetábulos de las mujeres. Además, en los hombres el acetábulo se dirige hacia la vista lateral, a diferencia de la mujer que se orienta hacia anterior.
El hueso sacro se encuentra mucho menos curvado hacia adelante en las mujeres que en los hombres. El hueso sacro es también más pequeño en las mujeres, pero más ancho.
El cóccix es una estructura que facilita el parto en las mujeres, por lo que en ellas es naturalmente muy flexible y se orienta en una posición recta. El cóccix del hombre por el contrario es rígido y se orienta hacia adelante.
Los agujeros obturadores toman una forma triangular en las mujeres, mientras que en los hombre es más ovalada (pueden llegar a ser redondos inclusive).
La pelvis se articula con el sacro a nivel de la articulación sacroilíaca (sinovial plana), que está reforzada con fuertes ligamentos que proporcionan estabilidad y soporte.
Como podemos observar existen diferencias remarcables entre una pelvis y otra, pero todas con un propósito o fin específico.